Cuando se trata de quemadores de grasa, hay para todos los gustos. Existen decenas de referencias, algunas para el gran público, otras con una acción más dirigida a la musculación y, por último, algunos productos que se presentan como alternativas naturales. ¿Cuáles son? ¡El equipo de Athletes Temple te lo cuenta todo sobre ellos!
Cuando oímos hablar de los quemadores de grasa para la musculación, a veces es difícil entender lo que se esconde detrás del nombre. En realidad, estamos hablando de un segmento del mercado en el que el quemador de grasas está compuesto por ingredientes de origen natural. O, al menos, ingredientes que se encuentran en la naturaleza. Por definición, se oponen a los demás quemadores de grasas, los que utilizan moléculas sintetizadas en laboratorios.
¿Es mejor para la salud?
En materia de salud, siempre hay debate. A primera vista, un producto que pretende ser natural será mejor para la salud. Al menos, será mejor para el organismo que una molécula química. Sin embargo, hay que matizar esta afirmación.
Por el momento, a menos que se consuman directamente los alimentos conocidos como quemagrasas, no se puede estar seguro de cómo se producen. La cafeína, por ejemplo, se encuentra fácilmente en multitud de alimentos. Y por lo general, la cafeína que se encuentra en un quemador de grasa procederá del café, del té verde o del guaraná. En la etiqueta de ingredientes figurará «extraído de…».
Pero esto no es especialmente cierto en el caso de otros supuestos ingredientes naturales. Pensemos en la L-carnitina. Es cierto que se trata de un ácido graso que se encuentra de forma natural en ciertos alimentos. Sin embargo, a escala industrial, es más fácil sintetizarlo en un laboratorio que extraerlo de los alimentos. Por no hablar de la cantidad de residuos que se generarían. Así que, por razones logísticas y financieras, tendremos un ingrediente natural producido en un laboratorio.
Esto da que pensar, y cada uno puede hacerse su propia idea…
¿Es más eficaz?
La eficacia de un quemador de grasas para musculación es difícil de calibrar. En los estudios a doble ciego, algunos productos conocidos por su eficacia, como los esteroides, han sido a veces superados por grupos de control que habían recibido un placebo.
Aparte de eso, la eficacia de un producto debe juzgarse en función de los resultados. Por eso siempre es una buena idea consultar las numerosas reseñas en Internet dejadas por usuarios anteriores.
Por último, como cualquier comprador, hay que tener cuidado a la hora de adquirir un producto y no dejarse engañar por el marketing. La mejor forma de hacerlo es dar la vuelta a la caja y leer la lista de ingredientes. La composición es interesante. La dosificación es aún más interesante. Si observamos que un quemagrasas sólo contiene un 0,01% de cafeína aunque afirme ser «rico en cafeína», ¡es más que probable que su efecto sea principalmente psicológico!
Evidentemente, tanto la eficacia como el efecto sobre la salud dependen principalmente de la composición exacta de un quemador de grasas para musculación.