En los gimnasios y en los armarios de los culturistas se pueden encontrar muchos productos y suplementos de musculación. Es importante recordar que todos estos productos, por inofensivos que parezcan a primera vista, tienen dosis y efectos muy reales en el organismo. Incluso los mejores quemagrasas no son una excepción a esta regla. Para obtener resultados óptimos al final del ciclo, es mejor evitar algunos errores.
Evitar la sobredosis
Cuando estás en medio de un esfuerzo y no está dando sus frutos, quieres ir un poco más allá. Un poco más rápido o un poco más fuerte. Y ahí es donde está el peligro. Zyzz ha tenido experiencias amargas y fatales al respecto.
Cuando se trata de suplementos, aunque sean menos peligrosos que las drogas, hay que evitar las sobredosis.
Una sobredosis de quemador de grasa para culturismo es poco probable que sea fatal. Pero puede enfermarte. Esto significa varios días de baja durante los cuales no se puede entrenar. Existe el riesgo de pérdida de masa muscular, de ralentización de los progresos y de no obtener resultados.
Esto también ocurre con los mejores quemadores de grasa, no sólo con los productos básicos.
No mezclar
Existe un principio general según el cual no se debe exagerar mezclando productos. Y eso es lo que aconsejamos en Athletes Temple. Aunque es tentador hacerlo para aumentar la eficacia, puede ser peligroso. Simplemente porque se vuelve al principio de la sobredosis… si los productos contienen ingredientes idénticos.
Se trata sobre todo de evitar las mezclas dudosas y las interacciones entre moléculas diferentes. Sobre todo si se utilizan productos químicos. Los productos naturales plantean algo menos de problemas en este sentido.
Una mezcla peligrosa puede provocar problemas de salud. Éstos detendrán el ciclo en el que te encuentras y, por tanto, reducirán los resultados finales.
Sigue un buen horario al tomarlos
Los quemadores de grasa para culturismo se toman a horas concretas. Al menos, a horas que se correspondan con tu ritmo de entrenamiento. Esto varía de una persona a otra, en función de su programa de entrenamiento.
Hay que tener en cuenta que cada fabricante puede indicar una posología y un modo de empleo. Seguirlos es siempre una ventaja para obtener resultados óptimos.
En su funcionamiento, el quemador de grasas genera termogénesis en el organismo. En otras palabras, aumenta la actividad metabólica para obligar al cuerpo a consumir más calorías. Esto se consigue aumentando la temperatura corporal. Para producir más calor, literalmente, el cuerpo tiene que proporcionar más combustible: calorías.
Para aumentar este efecto, puede optar por tomar un quemador de grasa justo antes del entrenamiento. La actividad se superpondrá al efecto del quemador, como una pila. Esto aumenta los resultados. Tomarlo justo después de un entrenamiento tampoco es mala idea, porque el metabolismo sigue trabajando. No se detiene con el final del entrenamiento. Son horas preciosas que puedes ahorrar para optimizar tus resultados.